La especificación para cualquier proyecto de construcción detalla los requisitos exactos del edificio tal y como se ha diseñado, así como los productos y materiales que satisfacen esas necesidades. Por ello, una especificación sólida es una parte fundamental para garantizar el éxito a largo plazo de un proyecto arquitectónico. Aunque se pueden hacer cambios en una especificación aprobada, es crucial tener en cuenta antes una serie de factores:

Cumplimiento de la normativa

La complejidad de cumplir con la legislación -incluida la normativa contra incendios y de accesibilidad- significa que cuándo no se sigue una especificación existe el riesgo de que las puertas instaladas no funcionen correctamente. Por ejemplo, si la fuerza ejercida por un determinado cierrapuertas es demasiado elevada, las puertas serán demasiado pesadas y difíciles de abrir para los ocupantes del edificio. Del mismo modo, si la fuerza de apertura es demasiado baja, las puertas cortafuegos pueden no cerrarse del todo, comprometiendo la seguridad en el edificio en caso de incendio.

Costes a largo plazo

La ingeniería de valor se identifica a menudo como el motor clave detrás de los cambios de especificación. Las presiones financieras pueden conducir a modificar elementos del edificio respecto al producto especificado en origen. Se trata de un esfuerzo por reducir los costes iniciales. Aunque esto puede reducir las presiones a corto plazo, también puede aumentar los gastos de mantenimiento del edificio a largo plazo. Esto se debe, a que las puertas y los herrajes se encuentran entre los elementos más utilizados de un edificio y estarán sometidos a miles de ciclos de apertura y cierre al año y seguramente a millones a lo largo de su vida útil.

Se asgeura que los productos especificados son adecuados para su uso previsto mediante la contratación de un ferretero.

Mantenimiento

Un último factor a tener en cuenta, es el cumplimiento a largo plazo de la especificación original. Es importante asegurarse de que, si los herrajes de la puerta deben ser sustituidos (como parte de la revisión y el mantenimiento del edificio) las piezas de repuesto cumplan los requisitos de la especificación original, así como toda la legislación vigente. Las piezas inadecuadas podrían hacer que la puerta no funcionara como es debido.

Para garantizar una especificación sólida, se aconseja contratar a un proveedor de confianza en las primeras fases del proceso. Esto permite identificar la solución correcta y a incluir información detallada en la especificación. Esto permite comparar el rendimiento de los productos. Es vital cuando se ha adjudicado un contrato tras un proceso de licitación, ya que así se garantiza que la propuesta de la organización seleccionada sigue cumpliendo los requisitos del contrato de diseño. Se puede reforzar a lo largo del proceso de construcción, mediante la realización de inspecciones programadas de los trabajos en curso.