Después de los hogares, los colegios son sin duda los edificios más importantes para el desarrollo de los niños y niñas. El diseño y la arquitectura de los centros educativos influyen significativamente en el progreso físico, cognitivo, social, emocional y creativo de los alumnos y alumnas.

Al proporcionar entornos propicios para el aprendizaje y el crecimiento, los edificios escolares contribuyen al desarrollo holístico de los escolares, apoyando sus logros académicos, su bienestar y su preparación para el futuro.

Mucho después de que los estudiantes se gradúen, puede que no recuerden las fórmulas de álgebra, los detalles de la tabla periódica o algunas fechas importantes de la historia. Sin embargo, no cabe duda de que sus experiencias escolares, moldeadas por el diseño y la arquitectura de la escuela, permanecerán con ellos.

Por qué la arquitectura escolar es importante para la educación y el bienestar

El arquitecto estonio-estadounidense Louis Kahn (1901-1974) fue uno de los primeros en expresar la importancia de la arquitectura como herramienta educativa. Cuando recibió un extraño encargo para diseñar una escuela sin ventanas, Kahn observó: «Recibí una orden del consejo escolar que decía: ‘Tenemos una gran idea. No deberíamos poner ventanas en la escuela porque los niños necesitan espacio en las paredes para sus pinturas, y además las ventanas pueden distraer la atención del profesor’. ¿Qué profesor merece tanta atención? Al fin y al cabo, los pájaros de fuera, la persona que corre a refugiarse bajo la lluvia, las hojas que caen de los árboles, las nubes que pasan, el sol que penetra: todo eso son grandes cosas. Son lecciones en sí mismas».

Salud física y bienestar

Los edificios escolares proporcionan un entorno seguro y saludable para que los niños aprendan y crezcan. Unas instalaciones bien diseñadas, con ventilación e iluminación adecuadas y acceso a agua limpia e instalaciones sanitarias contribuyen al bienestar general de los alumnos y reducen el riesgo de problemas de salud. Los espacios adecuados para actividades físicas, como patios de recreo e instalaciones deportivas, promueven la forma física y fomentan un estilo de vida activo.

Un entorno propicio para el aprendizaje

Cuidando el diseño de aulas, bibliotecas y laboratorios se proporcionan espacios que favorecen el aprendizaje, el pensamiento crítico y la resolución de problemas. Las consideraciones acústicas, un mobiliario cómodo y una iluminación adecuada pueden crear una atmósfera propicia para la concentración, permitiendo a los estudiantes maximizar su potencial cognitivo.

Fomentar la amistad y la empatía

Las zonas comunes bien diseñadas, como cafeterías, espacios compartidos y zonas de reunión al aire libre, ofrecen oportunidades para la interacción social, fomentando la amistad, la empatía y el trabajo en equipo. Una arquitectura inclusiva y acogedora contribuye a crear un sentimiento de pertenencia y fomenta las relaciones positivas entre alumnos y profesores, al tiempo que contribuye a crear un sentimiento de comunidad.

Fomentar el compromiso y la curiosidad

Además, como observó Louis Kahn, ciertos entornos de aprendizaje pueden inspirar y dar energía a los alumnos, haciéndolos más dispuestos a participar e implicarse en las actividades educativas. Un uso meditado de los colores, los elementos naturales, el juego y los espacios interactivos puede contribuir a crear una atmósfera positiva y estimulante que motive a los alumnos a buscar activamente el conocimiento y el aprendizaje.

Las cinco escuelas siguientes han sido diseñadas teniendo en cuenta estas sensibilidades.

5 escuelas que utilizaron la arquitectura como oportunidad educativa

Campus Startup Lions – Condado de Turkana, Kenia

El Campus Startup Lions, una institución educativa humilde pero extremadamente sofisticada construida por el renombrado arquitecto burkinés Francis Kere, se asemeja a un termitero y se funde suavemente con la morfología natural de su entorno.

En una zona remota y empobrecida de África Oriental, este campus ofrece formación gratuita, redes de contactos y espacio de alojamiento a 200 estudiantes.

La Escuela Verde – Bali, Indonesia

Esta singular escuela de la paradisíaca isla de Bali se construyó íntegramente con estructuras sostenibles de bambú. Incorpora principios ecológicos y promueve la educación medioambiental.

Las aulas al aire libre, el entorno natural y la integración con la naturaleza crean un entorno de aprendizaje armonioso que hace hincapié en la sostenibilidad y la conexión con la Tierra.

Escuela ASA STEAM – Asunción, Paraguay

Al diseñar una escuela dentro del gran campus del Colegio Americano de Asunción, los arquitectos británicos David y Mary Medd se aseguraron de que su enfoque se alejara de la sobreprotección dominante en la arquitectura escolar.

El resultado fue la Escuela de Vapor ASA, con un diseño caracterizado por la apertura, la permeabilidad y la abundante luz natural, creando una fuerte conexión entre el espacio arquitectónico y el mundo y la naturaleza circundantes.

Escuela Vittra, Telefonplan – Estocolmo, Suecia

Esta escuela sueca es famosa por su diseño innovador y poco convencional. Ofrece espacios abiertos, entornos de aprendizaje flexibles y colores vibrantes.

La arquitectura fomenta la colaboración, la creatividad y el aprendizaje independiente al ofrecer varias zonas para diferentes actividades, como el trabajo individual, los debates en grupo y la reflexión en silencio.

Jardín de infancia MS – Maebashi, Japón

El jardín de infancia MS sigue una filosofía educativa centrada en el niño, y el diseño de su edificio lo refleja.

El planteamiento arquitectónico está plenamente integrado en la naturaleza y responde a los cambios estacionales. Incorpora elementos que atienden a las necesidades de los niños y fomentan su desarrollo. Los espacios están diseñados para promover la exploración, el juego y la interacción social, fomentando el sentido de la curiosidad, la creatividad y la independencia entre los alumnos.