Los aeropuertos son infraestructuras nacionales críticas. La tendencia al alza de los viajes aéreos entre las personas mayores exige consideraciones vitales sobre la accesibilidad de las instalaciones aeroportuarias. Estudios recientes, incluido uno presentado en la 7ª Conferencia Internacional Bienal sobre Tendencias Emergentes en Ingeniería, Ciencia y Tecnología (ICETEST 2023), destacan cuáles son los servicios esenciales para los viajeros mayores: asientos prioritarios en las puertas, señalización mejorada, amplias áreas de descanso, pasillos protegidos y baños accesibles para sillas de ruedas.

A medida que la población mundial envejece, según subraya una gran cantidad de estudios, se vuelve decisivo que los aeropuertos ofrezcan instalaciones accesibles, eficientes y cómodas para las personas mayores. La creciente importancia del mercado sénior se debe no solo a los cambios demográficos, sino también a un cambio en el comportamiento de los adultos mayores, que se mantienen más activos que nunca.

Ante estos avances, la industria turística debe priorizar la comprensión de las preferencias de viaje de los mayores. Este conocimiento permitirá la adaptación de los productos turísticos existentes para satisfacer mejor las necesidades de este sector demográfico en crecimiento.

Los desafíos para los viajeros mayores

Si bien los adultos mayores de hoy pueden ser más saludables en algunos aspectos que las generaciones anteriores, todavía son propensos a enfermedades crónicas como enfermedades cardiovasculares, Alzhéimer, diabetes, osteoporosis y obesidad. Estas condiciones pueden dificultar significativamente su capacidad para desplazarse por los aeropuertos.

Los cambios corporales asociados la edad, como la degradación muscular y esquelética, las afecciones respiratorias y el deterioro de la visión y la audición, también afectan a la forma en que interactúan con su entorno. Además, los problemas psicológicos como la ansiedad y la disminución de la adaptabilidad al cambio juegan un papel clave en su movilidad. 

Además, el estrés asociado con los viajes puede ser particularmente abrumador para las personas de edad avanzada.

Mejor accesibilidad para los viajeros mayores

Los aeropuertos podrían mejorar significativamente la accesibilidad para los viajeros sénior refinando varios aspectos clave. Esto incluye mejorar la señalización para que tenga en cuenta las limitaciones físicas relacionadas con la edad, incorporar tecnología y equipos amigables para las personas mayores y optimizar las opciones de transporte y servicio en todo el aeropuerto.

Muchas de estas mejoras requieren un esfuerzo mínimo, principalmente un cambio hacia soluciones más simples y claras que aborden las necesidades específicas de movilidad y percepción de las personas mayores a la vez que mejoran la usabilidad general.

Simplificación de los procedimientos de seguridad para las personas mayores

Uno de los mayores desafíos para los viajeros mayores en los aeropuertos implica administrar el equipaje y someterse a los procedimientos de seguridad de manera eficiente. Una solución ideal sería utilizar servicios de recogida de equipaje a domicilio, aunque esto plantea problemas de seguridad si no se gestiona bien.

Alternativamente, los servicios de terceros podrían agilizar este proceso al garantizar que el equipaje se transporte de manera segura al aeropuerto, donde se somete a controles de seguridad y luego se carga en el avión, con los procedimientos de facturación completados con anticipación.

En Europa, algunos aeropuertos ofrecen terminales remotas en el centro de las ciudades o en sus principales hubs de transporte, donde los viajeros pueden facturar su equipaje antes de tomar el transporte al aeropuerto.

En los Estados Unidos, el  programa TSA Cares brinda asistencia especial durante el proceso de control de seguridad para viajeros con problemas de movilidad, enfermedades mentales o cognitivas o necesidades relacionadas con el TEA, en busca de una experiencia más fluida y digna.

Una solución de control de pasajeros totalmente automatizada desarrollada por Rohde & Schwarz y dormakaba puede ayudar a facilitar la experiencia de control de seguridad para todos los viajeros, incluidos aquellos con necesidades especiales. Actualmente se está probando en aeropuertos de Estados Unidos y Europa, y permite al personal de seguridad disponible en los puntos de control mostrar un trato más personalizado a aquellos pasajeros que realmente lo requieren.

Comunicación e instrucciones claras

La comunicación efectiva para los viajeros mayores comienza con una señalización clara y legible para garantizar una experiencia de viaje sin estrés. Es crucial priorizar la jerarquía de la señalización para distinguir claramente la información direccional de las pantallas promocionales.

La elección de los colores es vital, ya que los adultos mayores pueden tener dificultades para distinguir los sutiles tonos pastel: son recomendables los colores más brillantes y distintivos. Además, la colocación de los signos debe ser estratégica para facilitar la comprensión inmediata.

El tamaño del texto debe ser lo suficientemente grande como para permitir una fácil lectura a distancia. A menudo, los mapas de situación son demasiado complejos y difíciles de descifrar. Simplificarlos puede hacer que sean más comprensibles para las personas mayores.

En cuanto a las solicitudes de información, muchos adultos mayores prefieren interactuar con el personal de los mostradores de información en lugar de utilizar pantallas táctiles, a menos que estas interfaces digitales sean excepcionalmente fáciles de usar e intuitivas. Este enfoque de la comunicación y la señalización puede mejorar en gran medida la experiencia aeroportuaria para los pasajeros mayores. 

Capacitación del personal para la asistencia a las personas mayores

Los programas de capacitación efectivos para el personal de seguridad aeroportuaria son críticos, particularmente para garantizar una asistencia comprensiva y cualificada a los viajeros mayores, que pueden ser más vulnerables o requerir un apoyo adicional. La paciencia y el conocimiento son rasgos fundamentales que el personal debe exhibir para ayudar a quien lo necesite de manera efectiva.

Una formación integral permite al personal manejar situaciones inesperadas con más eficiencia. Además, el desarrollo profesional continuo es clave para mantener al personal de seguridad actualizado sobre las últimas tecnologías y procedimientos. Esta formación continua no solo agudiza sus habilidades, sino que también fomenta un sentido de confianza en las interacciones con todos los viajeros, garantizando un entorno de apoyo y seguridad para las personas mayores. Este enfoque subraya la importancia de la empatía y la competencia para mejorar la experiencia de viaje de los pasajeros mayores.

Mejorar la accesibilidad desde el inicio del viaje

La experiencia en el aeropuerto para los viajeros mayores debe comenzar incluso antes de ingresar a la terminal. La señalización engañosa u obsoleta, por ejemplo, puede crear una confusión innecesaria.

La complejidad de los diseños de los aeropuertos, los cambios frecuentes en las asignaciones de las puertas de embarque de las aerolíneas y las múltiples opciones de transporte, como las lanzaderas y los servicios de alquiler, se suman a los desafíos de navegación que enfrentan los pasajeros mayores. Una señalización eficiente y una información clara y actualizada son esenciales desde el momento en que se acercan al aeropuerto.

Desafíos en el estacionamiento y el acceso inicial al aeropuerto

El estacionamiento a menudo presenta una primera barrera significativa para los mayores antes incluso de acercarse al aeropuerto. Las opciones de aparcamiento más asequibles, situadas lejos de las temrinales, obligan a los viajeros sénior a lidiar con condiciones climáticas potencialmente adversas y autobuses de enlace. Una vez en la terminal, la ausencia de carritos de equipaje disponibles puede complicar aún más su viaje.

La implementación de soluciones sencillas, como rampas dedicadas, carriles de seguridad prioritarios y la asistencia de personal específicamente capacitado para manejar sillas de ruedas y equipaje, puede aliviar significativamente estos obstáculos iniciales.

Soluciones tecnológicas amigables con las personas mayores

Si bien la tecnología desempeña un papel fundamental en la mejora de los procesos estructurales y las medidas de seguridad en los aeropuertos, debe ser accesible y comprensible para quienes no son usuarios diarios.

Simplificar la tecnología para atender a las personas mayores, con instrucciones y ayudas claras, es esencial para que sirva como una herramienta de seguridad confiable. Este enfoque garantiza que los viajeros mayores puedan beneficiarse de los avances tecnológicos sin sentirse abrumados o excluidos.

Las aplicaciones para teléfonos inteligentes con información de puertas de embarque, como FlightTrack, pueden ayudarles a elegir incluso el aparcamiento más conveniente y permitirles acceder a toda la información de vuelos.

Colaboración con Grupos de Defensa de las Personas Mayores

Los aeropuertos por sí solos no pueden abordar completamente las necesidades de los viajeros mayores; un enfoque colaborativo es esencial. Las aerolíneas, los diseñadores de cabinas, los fabricantes de letreros y otros deben trabajar en conjunto para crear entornos que se adapten a las personas mayores desde el momento en que llegan al aeropuerto hasta el momento en que abordan sus vuelos. 

Los proyectos en curso están abordando los desafíos de movilidad, como el desarrollo de asientos adaptables que permitan a las personas con problemas de movilidad permanecer en sus sillas de ruedas durante los vuelos en lugar de transferirse a asientos estándar.

También se están realizando esfuerzos para diseñar baños más cómodos en los aviones, basándose en las regulaciones establecidas en 1990 que requieren que los aviones de fuselaje ancho o de pasillo múltiple tengan baños más grandes y accesibles. El objetivo es extender estos estándares también a los aviones de pasillo único.

Si bien estas mejoras pueden no ser inmediatas, es de suma importancia planificar teniendo en cuenta el futuro. Los jóvenes viajeros de hoy se convertirán en los ancianos del mañana.